~Tony Tirado
A una semana del inicio de su funcionamiento, el refugio temporal para migrantes instalado a un costado del Biblioavión permanecía ayer al 10.66 por ciento de su capacidad.
De acuerdo con el director de Derechos Humanos del Municipio, el espacio que cuenta con una capacidad de alojamiento para hasta 300 personas ayer albergaba a 32, aunque no dio a conocer las nacionalidades.
Según la información proporcionada, el espacio humanitario está destinado únicamente para madres y padres con niñas, niños y adolescentes migrantes que sean canalizadas por el INM desde el bordo del río Bravo, el retén militar conocido como Precos, el aeropuerto internacional Abraham González o los trenes de carga en los que arriban a la frontera.
La mañana de ayer, dos mujeres migrantes fueron canalizadas por el Instituto Nacional de Migración (INM), las cuales fueron recibidas por personal de Grupo Beta, en el espacio dirigido en coordinación con el Municipio.
Sin más ropa que la que llevaban puesta, con sólo una chamarra en las manos y visiblemente cansadas, ambas descendieron de la unidad federal para ingresar el refugio al que se impide el acceso a los medios de comunicación, pero es de puertas abiertas para las personas migrantes.
El espacio ubicado en la intersección de las calles David Herrera Jordán y Moctezuma, cuenta con tres carpas, baños y regaderas portátiles y alimentación.
Está pensado para operar en una primera etapa de dos meses de operación, en los que el INM se encargará de dichos gastos, así como los alimentos mientras que dentro de las instalaciones el personal de Derechos Humanos del Municipio y de Grupo Beta se encargan del trabajo humanitario.
Según las autoridades locales, personas serán asesoradas en el trámite de la aplicación móvil CBP One, para que puedan ingresar de manera regular a Estados Unidos, en busca de asilo. Y después de una semana y media se analizará cada caso para canalizarlas a un albergue local.
