La Cámara de Diputados inició el parlamento abierto sobre la reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales.
En el encuentro, representantes del sector privado advirtieron que dicha reforma tendría un impacto de 360 mil millones de pesos al año para las empresas, sin embargo, los legisladores de diversos grupos parlamentarios, con excepción del Partido Acción Nacional (PAN), se declararon a favor, como un acto de justicia social.
La oficial mayor de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), Leslie Berenice Baeza, expresó el respaldo de dicha central a la reforma y remarcó que, a más de 100 años del reconocimiento de la jornada máxima, es válido hacer este análisis y tomar medidas progresivas que ayuden a las y a los trabajadores.